No hay una prueba estándar para detectar encefalopatía hepática. Sin embargo, los análisis de sangre pueden identificar problemas como infecciones y sangrado asociados con la enfermedad hepática. Es posible que su médico ordene otras pruebas para descartar afecciones que causen síntomas similares, como accidentes cerebrovasculares y tumores cerebrales.
¿Qué marcador indica encefalopatía hepática?
Los niveles séricos de amoníaco están elevados en el 90% de las personas, pero no toda la hiperamonemia (niveles altos de amoníaco en la sangre) está asociada con la encefalopatía. Una tomografía computarizada del cerebro por lo general no muestra anomalías, excepto en la encefalopatía en etapa IV, cuando la inflamación del cerebro (edema cerebral) puede ser visible.
¿Qué prueba de laboratorio indica encefalopatía?
Se puede usar una prueba de niveles de amoníaco para diagnosticar y/o monitorear condiciones que causan niveles altos de amoníaco. Estos incluyen: Encefalopatía hepática, una condición que ocurre cuando el hígado está demasiado enfermo o dañado para procesar adecuadamente el amoníaco. En este trastorno, el amoníaco se acumula en la sangre y viaja al cerebro.
¿Cómo se examina la encefalopatía?
También pueden hacerle otras pruebas, como:
- Pruebas de concentración, memoria y otras tareas mentales.
- Análisis de sangre y orina.
- Pruebas de líquido cefalorraquídeo.
- Exploración de imágenes, como tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética nuclear (RMN)
- Electroencefalografía (EEG), que mide la actividad eléctrica del cerebro.
¿Cómo se descarta la encefalopatía?
¿Cómo se diagnostica la encefalopatía?
- análisis de sangre para detectar enfermedades, bacterias, virus, toxinas, desequilibrio hormonal o químico, o priones.
- punción lumbar (su médico tomará una muestra de su líquido cefalorraquídeo para buscar enfermedades, bacterias, virus, toxinas o priones)
- Tomografía computarizada o resonancia magnética de su cerebro para detectar anomalías o daños.