Dado que la intención es un estado mental, es una de las cosas más difíciles de probar. Rara vez hay evidencia directa de la intención del acusado, ya que casi nadie que comete un delito lo admite voluntariamente. Para probar la intención delictiva, uno debe basarse en pruebas circunstanciales.
¿Se puede probar la intención mediante pruebas directas?
Muchos delitos penales requieren una "intención específica" por parte del acusado con respecto a sus acciones. … La intención específica, sin embargo, rara vez puede probarse mediante pruebas directas: [la intención] debe probarse mediante las inferencias razonables que muestran las pruebas y las circunstancias circundantes.
¿Se puede presumir la intención?
La intención delictiva también se puede presumir a partir de la comisión del acto. Es decir, la fiscalía puede basarse en la presunción de que una persona busca las CONSECUENCIAS NATURALES Y PROBABLES de sus actos voluntarios. … Algunos delitos requieren una INTENCIÓN ESPECÍFICA.
¿Cómo se prueba un delito de intención específica?
Probar la intención específica es lo mismo que probar la intención delictiva intencionada en el sentido de que debe demostrarse que el acusado no solo tenía la intención de cometer un acto culpable sino también las consecuencias del actoUn acto realizado con una intención específica requiere la intención de lograr un resultado específico.
¿Qué delitos son más fáciles de probar?
Los delitos de intención general son más fáciles de probar porque no es necesario demostrar que tenía algún propósito en particular.
Ejemplos adicionales de delitos de intención general incluyen:
- As alto;
- Batería;
- Violación;
- Homicidio involuntario (también conocido como Asesinato en segundo grado);
- Incendio provocado; y.
- DUI.